El Centro de Estudios Avanzados de Cuba (CEA) es uno de los más jóvenes del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), aunque dispone de un programa nacional y elabora su estrategia hasta 2030 por ser un componente significativo en el futuro desarrollo socio-económico del país.
La relevancia de su plataforma tecnológica obedece a la concepción del Comandante en Jefe Fidel Castro de introducir la nanociencia y la nanotecnología y expandirlas de manera acelerada en todas las ramas de la economía, de acuerdo con especialistas del sector.
Inaugurado hace menos de dos años en su primera fase por Miguel Díaz-Canel Bermúdez, actual Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, asombra por su magnitud en el sentido de que prevé impactar en la obtención de nuevos productos y tecnologías.
Por si fuera poco, su alcance está en materiales, algoritmos, transferencias de tecnología, sustitución de importaciones y creación de bases para fondos exportables, así como en incrementar la visibilidad de la ciencia cubana a nivel mundial, según las mismas fuentes de la institución, situada en la Carretera de San Antonio, Valle Grande, municipio capitalino de La Lisa.
No obstante, se orienta también hacia la bionanomedicina, la agricultura, la energía, el agua, el medioambiente y la construcción, los cuales están incluidos en los proyectos contratados en el Programa Nacional de Nanociencia y Nanotecnologías, que cuenta con profesionales de alto nivel y capacidades técnicas.
Los expertos definen la nanociencia como el estudio de los fenómenos y la manipulación de los materiales a escala atómica, molecular o macromolecular, donde las propiedades difieren de aquellas que se observan a gran escala.
En el caso de la nanotecnología, consiste en el diseño, caracterización, producción y aplicación de estructuras, dispositivos y sistemas, por medio del control de sus formas y dimensiones a escala nanométrica; es decir, la aplicación del conocimiento generado en la nanociencia.
En síntesis, la nanotecnología influye en casi todos los aspectos de nuestras vidas, desde fertilizantes más eficientes en la agricultura, en la electrónica los pequeños reproductores de archivos y hasta los gigantescos televisores.
Además, en el campo de los textiles se han logrado tejidos que no se manchan, ni se mojan y tampoco se arrugan, mientras en la medicina se aprovecha el tamaño de las nanoestructuras para transportar los medicamentos, y su empleo en la quema de tumores cancerígenos.
El CEA persigue tales propósitos y en la formación inicial de sus especialistas, y de conjunto con otras instituciones del país, realizó trabajos de investigación en nanopartículas magnéticas con péptidos para la terapia del cáncer y en la nanoformulación del Heberprot-P, de reciente registro en Corea del Sur.
También en un material compuesto multifuncional para la separación magnética del ADN –de interés forense– y la técnica de remoción de hidrocarburos, por medio de matrices orgánicas absorbentes funcionalizadas con nanopartículas de magnetita.
Si hasta la primera fase constructiva ya acumula resultados de consideración, en la segunda se dedicará a la producción de nanoestructuras y nanodispositivos y en la tercera a la edificación de un Parque Tecnológico, que permitirá el escalado de los nanoproductos.
Uno de sus más recientes aportes científicos, junto a colegas del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, consistió en captar la primera imagen del SARS-CoV-2, coronavirus causante de la pandemia de la COVID-19, a partir de muestras clínicas nacionales.
Las representaciones tomadas de pacientes cubanos se realizaron mediante microscopía electrónica de barrido, una técnica capaz de producirlas de alta resolución desde la superficie y que se aplica también en otras ramas, como la industria petroquímica y la metalurgia.
La más adolescente de las instituciones del CITMA es la Agencia de Ciencias Sociales y Humanísticas, creada en 2021y su presidenta es la Doctora en ciencias técnicas e investigadora agregada Yury Triana Velázquez (Pinar del Río, 4 de febrero de 1978).