La etapa capitalina de la edición 31 de la Feria Internacional del Libro de La Habana concluyó ayer domingo.
«Las complejas circunstancias en que vive el mundo, especialmente nuestro país, no han podido impedir que esta Feria tenga lugar con una amplia programación y la asistencia del pueblo, principal destinatario de este enorme esfuerzo», declaró, en la ceremonia de clausura, Juan Rodríguez Cabrera, presidente del Instituto Cubano del Libro.
Describió los días del evento como «jornadas de las artes en sus múltiples manifestaciones, teniendo al libro como su motivación central», y reafirmó que se trata del acontecimiento cultural más importante de nuestro país.
En los últimos diez días acudieron, a las sedes y subsedes habaneras de la fiesta literaria, más de 400 000 visitantes, mayormente niños, adolescentes y jóvenes, y se vendieron 710 475 volúmenes.
Además, se realizaron más de 2 000 acciones literarias, se presentaron más de 400 libros, y hubo decenas de conciertos, exposiciones y puestas en escena. Acompañaron la Feria 411 invitados de 54 países, 19 naciones más que en 2022.
Por el país invitado de honor, Ángela Beltrán, directora de Artes del Ministerio colombiano de Cultura, resaltó que la celebración de este evento permitió abrir nuevos lazos de conexión entre ambas naciones, «patrias hermanas que defienden la construcción de la paz», y que fue un gran placer compartir letras y sueños.
La editorial Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz, del Ministerio de Justicia, recibió el premio a mejor diseño de estand, y hubo menciones para los pertenecientes al Grupo de los 77 más China, y a la Alianza Francesa.
Se concedieron también reconocimientos especiales a los proyectos Nuestra Historia, Cuba Digital y Venezuela Patria Libre; al Pabellón Infantil Tesoro de Papel, al Salón profesional del libro, al Proyecto cultural Pinar del Río, a la Biblioteca Nacional José Martí, a Casa de las Américas y a las editoriales Letras Cubanas y Nuevo Milenio.
La ceremonia fue presidida por Rogelio Polanco Fuentes, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su Departamento Ideológico, y por Fernando Rojas, viceministro cubano de Cultura.
La etapa que cerró ayer es solo el principio de una celebración que se expandirá, por regiones, a todo el país, hasta concluir el 19 de marzo, en Santiago de Cuba.