La Habana, 19 jul - Dos sensibles medidas que reafirman que el Estado cubano sí tiene muy en cuenta el parecer de la población entrarán en vigor hoy: el otorgamiento de una libreta de abastecimiento a quienes temporalmente estén fuera de sus provincias, y la importación por personas naturales de alimentos, aseos y medicamentos, sin límites y libres de aranceles.
Además de responder a reclamos populares, ambas tienen en común su vigencia hasta el 31 de diciembre de 2021, su grado de excepcionalidad por las restricciones derivadas del impacto de la COVID-19 y del bloqueo de Estados Unidos a Cuba, evidenciado en la escasez de recursos, sin olvidar que pese a ello se ha garantizado la canasta básica normada a millones de personas.
De manera que desde hoy se espera cierto ajetreo en Oficinas de Registro de Consumidores, conocidas como Oficoda, para los trámites de solicitud y entrega de ese documento, con el cual adquirir los productos normados mientras se esté fuera de la provincia de origen, y en los aeropuertos –a excepción de los internacionales de Varadero y de Cayo Coco-, aunque la epidemia ha reducido los vuelos.
Como explicó en la Mesa Redonda Informativa Betsy Díaz Velázquez, ministra del Comercio Interior, más de 200 mil personas serán beneficiadas al autorizarles la constitución de un núcleo familiar, dado que muchas no han podido viajar a sus provincias de origen debido a la COVID-19, están alquiladas y tampoco reciben los productos de la canasta familiar normada donde temporalmente se hallan.
También se incluyen a los ciudadanos que no cuentan con el Certificado de habitable de la vivienda donde residen y aquellos que nunca han sido censados o repatriados.
Respecto a la importación por viajeros cubanos -y extranjeros- de alimentos, aseos y medicamentos, libres de pagos arancelarios, en el propio espacio radio-televisivo se explicó que los límites los pone la aerolínea.
Pero esos productos deben estar diferenciados o separados del resto del equipaje personal, en aras de facilitar y agilizar el cruce por frontera de los viajeros, subrayó Nelson Cordovés Reyes, jefe de la Aduana General de la República.
En el caso de los alimenticios pidió cumplir las regulaciones fitosanitarias y recordó que no se admitirán drogas ni fármacos con similar efecto.
Las nuevas condiciones para la importación de medicamentos, aseo y alimentos están recogidas en la Resolución 309 publicada en la Gaceta Oficial Extraordinaria No. 62, y al decir de Meisi Bolaños Weiss, ministra de Finanzas y Precios, no es la primera vez que Cuba toma una medida de este tipo, pues en 2008 tuvo que hacerlo debido a los daños causados por varios huracanes.
Los viajeros que arriben por Cayo Coco y Varadero solo pueden traer una maleta, en correspondencia con las medidas higiénico-sanitarias vigentes desde el 15 de julio, teniendo en cuenta la compleja situación epidemiológica nacional, regional e internacional y la necesidad de contener la propagación de casos de COVID-19 en el país.
Con el objetivo de disminuir los riesgos asociados a los viajeros internacionales, se adoptó un grupo de disposiciones relacionadas con el Control Sanitario Internacional para quienes lleguen al país por los aeropuertos internacionales Juan Gualberto Gómez, de Varadero, y Jardines del Rey, en Cayo Coco.
Otra medida es que se les prohíbe a los turistas el movimiento libre fuera de ambos polos turísticos.