Cerca de la hora de publicación de esta entrega, pero 7 años atrás, en el Atlántico, el huracán Irma, ya con categoría tres, enfilaba rumbo al norte del Caribe y Las Bahamas. Un momento en que parecía que Cuba escaparía al quedar justo al borde del cono, pero que lamentablemente en menos de 24 horas comenzaría a apuntar justo al centro del archipiélago, muy similar a otra “I”, que nos había visitado 9 años antes: Ike. Un pronóstico que desgraciadamente se cumpliría, llegando a las costas cubanas como categoría 5 poco después del momento que compartimos en la imagen que encabeza esta entrega y luego de más de 80 años sin un evento de esa magnitud.
Y es que es imposible hablar del mes de septiembre desde el punto de vista meteorológico o climatológico sin hacer mención de los ciclones tropicales. Solo lo invito a comparar estas dos imágenes, y verá que aunque hay diferencias, estas son muy pocas. A la derecha las trayectorias de todos los ciclones de nuestra área desde 1851 y a la izquierda solo los que han estado activos en septiembre (aunque se hayan formado en agosto), poco más del 40 % de todos.
¿Cómo nos irá?
En su pronóstico para el mes de septiembre de 2024 el Instituto de Meteorología, [disponible aquí] indica que las lluvias en el occidente tendrán un comportamiento por encima de lo normal, mientras que en la parte central y oriental estarán más cerca de lo normal, aunque con una tendencia a ser ligeramente superiores a los registros medios. Aunque muchos no lo pondría en la lista de uno de los “meses de agua” en Cuba, pero sí resulta uno de los más lluviosos. Como señala el mismo documento: “La influencia del anticiclón del Atlántico disminuye considerablemente con respecto a julio y agosto, lo que, unido al paso frecuente de las ondas y las bajas tropicales, propicia el incremento de las precipitaciones”. Algo que parece que va siguiendo casi al pie de la letra el presente mes en sus dos primeros días.
En cuanto a las temperaturas, se prevé que en la región central y oriental los valores mínimos estén por encima de lo normal, y que en el occidente, aunque correspondan al intervalo promedio, se ubiquen hacia el límite superior del mismo. El pronóstico para las temperaturas máximas debe superar la media histórica en todas las regiones del país, algo que ha sido constante en las predicciones mensuales.
Es importante señalar que aunque los valores promedio de temperatura del mes de septiembre no llegan a las cotas de su predecesor, hay factores que incrementan la sensación térmica, sobre todos aquellas calurosas y muy calurosas. Con la disminución de la influencia de las altas presiones también ocurre un debilitamiento de los vientos, que se combina con altos valores de humedad, para dar como resultado esta condición.