Una vez más, el Parlamento Europeo ha desempeñado el triste papel de rehén de un pequeño grupo de eurodiputados de la extrema derecha obsesionados con destruir la Revolución cubana, quienes tienen un vínculo demostrado con organizaciones radicadas en Miami financiadas por el gobierno de Estados Unidos.
La espuria e injerencista resolución que se acaba de aprobar en el Parlamento Europeo le resta credibilidad a esa institución y refleja la doble moral hacia la nación cubana. No existe en ella intención alguna de cooperar o dialogar, ni la más mínima expresión de respeto a Cuba como país libre, independiente y soberano.
Reiteramos nuestro enérgico rechazo a este engendro promovido por los representantes más extremistas de las agrupaciones políticas españolas Partido Popular y Vox, quienes no tienen ninguna autoridad moral para juzgar a Cuba y que han trasladado sus rencillas políticas internas contra el actual ejecutivo de ese país al Parlamento Europeo.
Frente a la retórica violenta, vulgar y neofascista de este grupo minoritario de europarlamentarios, se alzaron voces dignas que expusieron la verdad sobre Cuba y calificaron esta acción como una hipocresía. Se refirieron al bloqueo de Estados Unidos como la más flagrante violación de los derechos humanos del pueblo cubano y exigieron su eliminación, al tiempo que defendieron el desarrollo de una relación respetuosa y constructiva entre Cuba y la Unión Europea.
Una resolución como esta, plagada de doble rasero, no nos quita el sueño. Los legisladores cubanos, junto al pueblo, del que somos parte inseparable y al cual nos debemos, trabajamos para fortalecer la estructura normativa de nuestra nación, que prioriza el disfrute pleno de todos los derechos humanos para todas las personas.
En Cuba, la cultura es de alcance universal y el Estado preserva el acceso cada vez más amplio del pueblo a todas sus manifestaciones. La cooperación médica cubana, de la cual también se han beneficiado pueblos europeos, es un paradigma de la proyección exterior de la Revolución sobre la base del principio martiano de que “Patria es humanidad”.
Las campañas promovidas por los enemigos y sus lacayos fracasan ante la voluntad de nuestro pueblo de seguir avanzando unido en la construcción de una sociedad cada vez más justa y democrática.
La razón es y será nuestro escudo.
Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea Nacional del Poder Popular de la República de Cuba.
La Habana, 10 de junio de 2021.