Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, afirmó hoy que el severo impacto del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, es imposible de ocultar.
A través de su cuenta oficial en Twitter, el jefe de la diplomacia en la isla afirmó que negar la existencia de una política que asfixia y mata resulta una mentira cínica.
Rodríguez Parrilla también refirió que por seis décadas, Cuba ha demostrado resistencia, creatividad y heroísmo, frente a un cerco que califica como acto de genocidio.
“El severo impacto del bloqueo de EEUU sobre el pueblo cubano es imposible de ocultar. Mienten cínicamente quienes niegan la existencia de una política que asfixia y mata. Son #60deResistencia, creatividad y heroísmo frente a un cerco que califica como acto de genocidio”, escribió el canciller.
Según cifras oficiales, solo entre abril de 2019 y diciembre de 2020, el asedio estadounidense produjo a Cuba perjuicios ascendentes a nueve mil 157 millones de dólares a precios corrientes, 436 millones mensuales de daños como promedio.
En el último quinquenio las pérdidas fueron superiores a los 17 mil millones de dólares y los daños acumulados en seis décadas alcanzan los 147 mil millones.
La Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) reafirmó en junio de 2021 su apoyo a la resolución cubana para poner fin a este acoso, sumando 184 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones.
Al presentar el informe, Rodríguez Parrilla destacó a la salud como uno de los principales sectores afectados por la política unilateral, situación que se arreció durante la actual pandemia de COVID-19.
Denunció además las medidas que perjudican directamente al pueblo cubano, como los obstáculos al envío de remesas, el normal desarrollo de los vínculos con cubanos residentes en Estados Unidos y la reunificación familiar.
El titular añadió que todo ello se complementa con una campaña de desprestigio financiada con el presupuesto federal, con el propósito de desestabilizar a la isla.
Respecto a la persecución financiera, fue calificada como una despiadada cacería que perjudica las transacciones con terceros países, la capacidad de pago y cobro y la posibilidad de acceder a créditos.
Cada año, desde 1992, Cuba presenta ante Naciones Unidas una resolución sobre la necesidad de levantar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, documento respaldado por la mayoría de los votantes.