La Habana, 5 sep. - Intelectuales de diversas regiones del mundo como los argentinos Stella Calloni y el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, exigen hoy al Gobierno estadounidense excluir a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo.
El reclamo mundial responde a una carta abierta del periodista franco-español Ignacio Ramonet dirigida al presidente Joe Biden, en la cual expone -con precisión quirúrgica- argumentos que acreditan a la nación caribeña como “promotora de la paz, la salud y la educación. Eso es lo contrario mismo de promover el terrorismo”.
Noble iniciativa respaldada por la institución habanera Casa de las Américas a través de una convocatoria de la que también se hizo eco el escritor nigeriano Wole Soyinka, Premio Nobel de Literatura en 1986; Atilio Boron, Ariel Dorfman, Iñaki Gil De San Vicente, Katya Colmenares, y Ramón Grosfoguel.
Fernando Buen Abad, Luisa Valenzuela, Patricia Ariza, Leonid Savin, Manolo de los Santos, Jorge Boccanera, Fernando Rendón, Marcos Roitman, Patricia Villegas, Sergio Arria, Pascual Serrano, Sara Rosenberg, Mónica Valente, Carlos Margotta, Juan Carlos Volnovich, entre muchos otros, suscribieron igualmente el reclamo.
En su misiva, Ramonet solicita al mandatario estadounidense que repare la “profunda injusticia cometida el 12 de enero de 2021 por su predecesor, Donald Trump, cuando, a unas semanas de abandonar la Casa Blanca, decidió -sin bases legales reales- reinscribir a Cuba en la infame lista de Estados patrocinadores del terrorismo (lista SSOT)”.
El también escritor y analista político rememoró cuando la Administración del presidente Barack Obama retiró al país caribeño de esa lista en 2015, “lo cual representó un paso muy positivo para forjar, por fin, una relación más constructiva con La Habana”.
Desde hace 65 años, a pesar de las tensiones que han podido existir entre Estados Unidos y Cuba, no se puede citar un solo caso de acción violenta ocurrida en territorio estadounidense que haya sido apadrinado, directa o indirectamente, por La Habana. ¡Ni un solo caso!, precisó el eminente intelectual.
Las consecuencias más atroces se derivan del riesgo asociado a cualquier tipo de ayuda humanitaria, negocio, inversión y comercio que implique a Cuba y, por extensión, a sus ciudadanos, añadió.
Todo ello sumado a “las terribles consecuencias del cruel e ilegal bloqueo económico, comercial y financiero que el Gobierno de su país mantiene contra Cuba desde hace más de 60 años”.
La ola migratoria actual de cubanos hacia Estados Unidos, inédita en su magnitud, es quizás el ejemplo más ilustrativo del impacto devastador y el sufrimiento provocado por las medidas extremas y brutales contra la economía cubana, aseguró.
Señor presidente, esa situación tiene que terminar, solicitó Ramonet. Usted lo sabe, no hay ni un solo argumento válido y razonable para acusar a Cuba y mantener a su población bajo un castigo colectivo ilegal e inhumano.
Usted tiene autoridad para, antes de abandonar la Casa Blanca, corregir tan cruel absurdo y sacar a Cuba de la lista SSOT. ¡Hágalo ya!, indicó el destacado intelectual al término de su carta, con la esperanza de que Joe Biden sepa estar a la altura de este momento histórico.