El doctor Ángel Batista Díaz, director de Salud en Ciego de Ávila, informó que los estudios de secuenciación virológica realizados en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí a muestras de esa provincia, en la última semana, confirmaron la presencia en cuatro de ellas de la variante Delta del SARS-CoV-2, también conocida como la cepa india.
“No queremos infundir pánico, pero es importante entender que Delta es altamente contagiosa, se estima que 3.5 veces más que el resto. Los estudios a nivel internacional indican que esta virulencia podría modificar hasta la distancia recomendada entre personas. Países con un elevado por ciento de vacunación, y que ya habían eliminado restricciones, están sufriendo ahora una nueva ola de contagios provocada por esta cepa”.
El galeno alertó que se han observado síntomas no relacionados con las vías respiratorias como diarreas o dolores musculares, y un impacto mayor en la población joven, por lo que recomendó declarar cualquier sintomatología a la pesquisa o acudir de inmediato a los centros de salud.
Sobre el incremento de contagiados en el territorio en el actual rebrote, Batista Díaz comentó que la débil infraestructura sanitaria ha motivado aumentar capacidades extrahospitalarias ya no para sospechosos o contactos, sino para confirmados.
“Hemos tenido que destinar los centros de aislamiento de contactos para sospechosos, y los contactos se están quedando en sus hogares. Sabemos que no es lo aconsejable, que es un riesgo muy grande, pero no tenemos más capacidades. Por eso recabamos la cooperación del pueblo en cumplir el aislamiento domiciliario correctamente, sin salir de la casa, usando el nasobuco”.
La grave situación sanitaria de Ciego de Ávila ha obligado a abrir centros de aislamiento para sospechosos con test de antígeno positivo en los municipios, cuando no es lo que está establecido en el protocolo. Pero no parece haber alternativas, pues cerca del 80 por ciento de las personas con sintomatología respiratoria resulta luego positiva al PCR-RT.
Aunque la provincia se mantiene en la fase de transmisión autóctona limitada, de la etapa epidémica, los indicadores de positividad, número de casos y la reactividad de los test de antígenos confirman una transmisión viral comunitaria en Morón y Ciego de Ávila. En palabras simples: el catarro no es catarro, es COVID-19.
(Con información del perfil de Facebook de Periódico Invasor)