El Ministerio de Salud Pública, luego de análisis realizados de conjunto con varias entidades responsables al respecto, tomó la decisión de destinar el segundo refuerzo de vacunación anti-COVID-19, a personas de 50 años de edad, y más, rango anteriormente concebido a partir de los 70.
Así lo hizo saber el martes, desde el Palacio de la Revolución, la doctora Ileana Morales Suárez, directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del Ministerio de Salud Pública (Minsap), en el encuentro de expertos y científicos enfrascados en actividades de ciencia e innovación tecnológica para el enfrentamiento a la COVID-19, y en el cual también fueron abordados otros temas relevantes para Cuba.
Con ese nuevo esquema de edades, serán un poco más de cuatro los millones de personas a las cuales les será administrada la dosis de refuerzo, según informó la doctora Ileana Morales en la reunión encabezada por el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; así como por el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, y los vice primeros ministros, Inés María Chapman Waugh y Jorge Luis Perdomo Di-Lella.
La directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del Minsap enunció que este fin de semana las dosis de refuerzo también comenzarán a administrarse a los grupos de riesgo. Sobre el alcance de tal proceso, Díaz-Canel comentó que «ahora el éxito de nosotros para mantener» las alentadoras cifras radica en «mantener el nivel de inmunización que tenemos, que tiene que ser sobre la base de los refuerzos».
Compartió la idea atendiendo a la evidencia de que, si el mundo no resuelve la situación de la epidemia, «vamos a seguir expuestos»: «O sea, nosotros no podemos perder la sistematicidad del refuerzo porque, si no, volvemos a una situación compleja».
Datos que ilustran la situación de la humanidad ante la COVID-19, y cuánto ha logrado la Isla en su enfrentamiento a la pandemia fueron parte de la actualización de la Estrategia de Vacunación anti-COVID-19 en Cuba. Morales Suárez prefirió empezar por las inequidades, porque, dijo, «cuando uno mira la línea de los países de bajos ingresos, contra lo que han logrado los de altos ingresos, son colosales las diferencias».
Una gráfica le sirvió de apoyo para disertar sobre el número de personas que en el mundo no se han vacunado contra el coronavirus. Al señalar en un mapa de colores cómo es que el planeta ha sido azotado por la variante Ómicron, la doctora afirmó que si el mundo estuviera vacunado como lo están la Isla y otros países, el gigantesco pico de la enfermedad no se hubiese producido.
La realidad está lejos de la premisa anterior, y es triste: solamente 14 países tenían más del 85 % de su población vacunada; una treintena de naciones tienen menos del 10 % en esa condición de salud; y hay 42 países que tienen menos del 20 %. Otro dato compartido habla por sí solo de la inequidad: 95 países –del total de 194 del orbe– tienen a menos del 50 % de su población vacunada.
Nos llena de orgullo a todos los cubanos, argumentó, que la Isla lidere la lista de países según la cantidad de vacunas que se administran cada cien personas»: «Lideramos esa cifra hace mucho tiempo, pero lo que más nos llama la atención –añadió la doctora– es la diferencia que tenemos contra la media mundial». La media mundial, enfatizó, no llega a 148, mientras Cuba tiene en su haber una cifra que supera los 320.
«En cuanto a mortalidad, estamos ya en lo mínimo posible, que era lo que nos vaticinaba hace como seis meses el profesor Guinovart». Y seguidamente mostró una lámina que «es de las que más nos gustan, de las que más nos sentimos satisfechos», según la cual la vacunación pediátrica ha llegado en Cuba a 1 909 980 niños (el 97,8 % del total).
Debían ser vacunados, dijo, 1 954 000 y un poquito más de niños: ese número de los que no se han vacunado representa a pequeños enfermos, o que han presentado alguna situación de salud. Ya la dosis de refuerzo en este grupo de la población, detalló la doctora, «va por un 61,3 %».
Sobre los millones de dosis administradas a lo largo del país, la experta recordó que administrar 36,3 millones en un año ha sido un esfuerzo grande, y seguimos, enunció. «Queremos seguir protegiendo a la población cubana, como usted (se dirigió al Presidente) nos ha indicado reiteradamente».
Una amplia información en el encuentro ofreció el doctor en Ciencias Pedro Mas Bermejo, la cual versó sobre el estudio de efectividad de la vacuna Abdala en la población pediátrica de Cuba. El también vicepresidente de la Sociedad cubana de Higiene y Epidemiología, dijo que «desde julio del año pasado venimos haciendo la evaluación, y ahí están los resultados»: un 94 % de efectividad para la enfermedad severa; y un 93,69 % para la muerte. Son resultados, aseveró, gracias a los cuales disminuyó tremendamente el número de fallecidos.
En cuanto a la efectividad de la vacuna Abdala en la prevención de la enfermedad asintomática, en pacientes comprendidos entre 16 y 18 años de edad, el porciento es de 98,9. Es «altísima esa efectividad», apuntó el experto.
Por todo el esfuerzo que Cuba ha protagonizado por salvar vidas frente a la COVID-19, este martes el doctor en Ciencias Raúl Guinovart Díaz, decano de la Facultad de Matemática y Computación de la Universidad de La Habana, pudo afirmar, basado en los modelos de pronósticos, que lo esperado es que la epidemia se mantenga controlada en el país durante las semanas próximas.
SEGUIMIENTO, DESPÚES DEL ACCIDENTE
Más de una vez preguntó el Presidente Díaz-Canel por las familias que han sido duramente golpeadas por el siniestro del Hotel Saratoga, acontecido el 6 de mayo. Lo hizo durante la reunión del Grupo temporal de trabajo de prevención y enfrentamiento a la COVID-19, en la cual se dio seguimiento a cuanto se hace a raíz de la explosión de la instalación turística ubicada en La Habana Vieja.
En la reunión –que también contó con el primer ministro Manuel Marrero Cruz, así como con el general de cuerpo de ejército de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y Héroe de la República de Cuba, Ramón Espinosa Martín–, se pasó revista, al detalle, a cómo están siendo atendidas las familias afectadas.
El ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca Díaz, informó que los ofrecimientos realizados en estos días por instituciones internacionales son fundamentalmente bienes para los afectados y recursos para la Salud Pública (entre medicamentos e insumos médicos): «Hay donaciones de instituciones del sistema de Naciones Unidas, de empresas extranjeras, y de asociaciones de cubanos residentes en el exterior», dijo el titular, quien mencionó también a entidades cubanas.
El gobernador de La Habana, Reinaldo García Zapata, enunció que ha concluido el levantamiento de las necesidades de todas las familias que se encuentran alojadas en la Villa Panamericana. «Ya levantamos las afectaciones puntuales que tuvieron cada una de esas familias». Y añadió: «estamos revisando todas las familias de los fallecidos, porque la situación es bastante delicada en algunas, porque muchos de los fallecidos eran el sostén de sus familias».
Según describió García Zapata, se atienden a la par varios frentes: se vienen trasladando las pertenencias de las familias que debieron ser evacuadas; se continúa trabajando en las viviendas, en la escuela afectada, al igual que en el Capitolio, y en el Teatro Martí.
El Jefe de Estado se interesó por las personas que llevan tratamiento de pensión a raíz de los sucesos del Saratoga. Al respecto, Marta Elena Feitó Cabrera, ministra de Trabajo y Seguridad Social, explicó que se están tramitando todas las pensiones, se están reconstruyendo los tiempos de servicio, y se han concebido pensiones provisionales, en aras de ganar tiempo, mientras se elaboran las oficiales. A las 22 familias que están en la Villa Panamericana, agregó, les ha sido entregada una prestación por la Asistencia Social.
Por su parte, el titular del Minsap, José Angel Portal Miranda –quien al abordar las cifras alusivas a la COVID-19 afirmó que siguen disminuyendo los niveles de incidencia de transmisión– dijo, en lo concerniente al parte de afectados por el siniestro del hotel que, de los 99 que fueron lesionados, se mantiene el número de fallecidos (46). Hay 41 altas médicas. Hay 12 pacientes hospitalizados (de ellos, uno crítico). Hay cuatro en estado grave (de ellos, dos son niños), y hay siete pacientes de cuidado (de los cuales dos son niños). En el caso de los adultos, hay uno crítico. En el caso de los niños, de los cuatro hay dos graves, dos de cuidado, y ninguno está crítico, y el paciente de nacionalidad española sigue evolucionando favorablemente.
A través de videoconferencia, las autoridades de cada provincia y del municipio especial Isla de la Juventud informaron a la dirección del país sobre la situación de la epidemia de la COVID-19 y otros asuntos de prioridad para la vida nacional.