El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, reafirmó hoy la protección de su país a la infancia frente a cualquier tipo de explotación, un principio consagrado en el ordenamiento jurídico nacional.
En su cuenta de Twitter el mandatario precisó que la prohibición del trabajo infantil es uno de los elementos que rigen el derecho al empleo en la isla caribeña, y añadió que el Estado garantiza la protección de los menores y su interés superior, de acuerdo con instrumentos y compromisos internacionales.
A propósito del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, igualmente ratificó en esa red social que de los 160 millones de niños que realizan alguna tarea laboral, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), ninguno es cubano.
El ministro de Exteriores agregó que el elevado nivel educacional de la población de la nación antillana y la atención a la familia, garantizan la seguridad de la niñez en el país.
Recientemente Unicef y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) emitieron un informe en el que advirtieron que los casos de trabajo infantil aumentaron en 8,4 millones en los últimos cuatro años, y actualmente suman 160 millones de infantes que realizan algún tipo de actividad laboral.
La situación agravó debido a la pandemia de Covid-19, señala el documento, y resalta que los avances por erradicar el problema se estancaron por primera vez desde hace 20 años.
El texto destaca asimismo el aumento de la cantidad de niños de cinco a 11 años en situación de trabajo infantil, lo que representa algo más de la mitad del total.