La atención a las personas más vulnerables deviene política permanente en Cuba, aun en el contexto excepcional por el que atraviesa la economía. Bajo el principio de que nadie queda desamparado ni abandonado a su suerte, el Gobierno aprobó financiar, por el Presupuesto del Estado, una ayuda económica temporal a los beneficiarios de la asistencia social que reciben prestaciones monetarias, para asumir el costo de la canasta familiar normada, el arroz adicional y los productos de aseo que se entregan de forma controlada a través de la libreta de abastecimiento.
La decisión se hizo efectiva a partir de este mes de septiembre y ello se suma a las prestaciones y servicios que se ofrecen a través del sistema de seguridad social.
Esta ayuda económica, que se otorga en correspondencia con la composición del núcleo familiar, ya ha sido recibida por 161 574 beneficiarios de la asistencia social, en las unidades de correo donde habitualmente efectúan el cobro de la prestación monetaria. El pago se extenderá hasta el próximo 15 de septiembre.
Según una nota enviada a nuestro diario por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, esta medida es coherente con la política de beneficio social que ha defendido históricamente la Revolución Cubana, y ratifica la voluntad del Gobierno de dar atención priorizada a los que más lo necesitan.